¿Por qué la gente come postres?
¿Qué tipo de postre es el más sencillo
Todos hemos experimentado alguna vez la sensación de estar "lleno hasta los topes" después del plato principal, incluso de tener que desabrocharse el botón superior del pantalón. Sin embargo, al mencionar el postre, ya no se está lleno. Pues bien, ahora hay una explicación científica de por qué siempre queda sitio para el postre, el llamado fenómeno del "estómago de postre".
En pocas palabras, el postre es la única parte de la comida que nos queda por probar y la anticipación de una nueva experiencia de sabor crea apetito. Los postres tienen propiedades sensoriales diferentes del plato principal, por lo que estar lleno y sentirse satisfecho son dos cosas muy distintas.
Según un nuevo estudio publicado por el Journal of Experimental Psychology, tomar el postre primero, en lugar de después de la comida principal (como hacemos todos), se asocia con ingerir menos calorías. Numerosos estudios han llegado a la conclusión de que las personas elegían comidas más saludables y consumían menos calorías cuando tomaban el postre en primer lugar. Ni siquiera era necesario consumir el postre para hacer elecciones más saludables, pero el simple hecho de saber que habían elegido una opción más dulce era suficiente para marcar una diferencia psicológica.
Beneficios de comer postre todos los días
¿Cuántas veces te han hecho sentir culpable los fanáticos de la salud que te rodean por darte un capricho dulce "sin motivo aparente"? Un sinfín de sermones sobre cómo los postres deben comerse con moderación o no comerlos en absoluto parecen resonar en nuestros oídos cada vez que nos ven mordisqueando nuestros dulces favoritos.
Aunque en realidad no necesitamos una razón para comer postres, hay quienes se preguntan asombrados por qué somos amables con nosotros mismos con tanta frecuencia sin una razón adecuada. Para los entendidos en postres, sin embargo, no importa la ocasión ni la época del año. Más bien, se trata de alimentar el alma con comida que les haga sentir que por fin han encontrado el cielo en la tierra.
Comer postre no significa que tengas poco o ningún autocontrol. Sólo significa que tienes un buen sentido de lo que quieres (a veces es sólo un pecaminoso pastel de queso con arándanos), y que tienes lo que se necesita para honrar estos antojos.
A largo plazo, negarnos constantemente estos sencillos placeres puede hacernos sentir que no los merecemos y también resentirnos como seres humanos, especialmente a las personas como yo, para las que el postre es un verdadero amor. La idea es obtener placer de cosas sencillas como comer tus dulces favoritos.
¿Por qué el postre sabe dulce?
Para mucha gente, no es una verdadera cena si no hay postre. Esta tradición de terminar la comida con algo dulce tiene su origen en Francia. Como explica la especialista en gastronomía francesa Maryann Tebben, el postre francés existe desde hace siglos, pero ha cambiado mucho a lo largo de ese tiempo.
Los libros de cocina francesa de la Edad Media y el Renacimiento no incluían precisamente postres. En su lugar, incluían recetas de entremeses, platos "intermedios" que se servían entre platos más grandes y que podían ser dulces o salados.
La palabra "postre" surgió en el siglo XVII, derivada del verbo francés "desservir", que en inglés significa "recoger la mesa". La etiqueta dictaba que las servilletas y los manteles debían cambiarse antes del plato final, que en aquella época era un delicado plato de frutas. En un contexto cortesano, el plato en sí se conocía como "le fruit", pero los burgueses lo rebautizaron como "postre". Tras la Revolución Francesa, la aristocrática "fruta" fue totalmente sustituida por "postre".
Poco a poco, sin embargo, el sabor de los postres dejó de ser tan importante como su presentación visual. El plato de postre podía consistir en elegantes estructuras de metal y cristal que sostenían manzanas o ciruelas enteras. Otras veces, figuras de azúcar meticulosamente elaboradas se convertían en el centro de los postres y podían no comerse. Los especialistas en postres del siglo XVIII debían entender el diseño arquitectónico y ser capaces de reproducirlo en pasta de azúcar.
3 razones para comer postre
A todos nos encantan los postres, y no es ningún secreto que morder nuestros dulces favoritos nos hace increíblemente felices. Pero, ¿con qué frecuencia disfrutamos de verdad de ese bol de helado o ese trozo de tarta sin sentirnos culpables? Se habla mucho de cómo comer postres puede ser aparentemente perjudicial para nuestra salud, sobre todo si estamos intentando perder esos kilos de más. Pero se pueden evitar fácilmente esos efectos nocivos practicando la moderación. De hecho, darse un capricho con los postres de vez en cuando tiene una serie de beneficios. Sigue leyendo para conocer algunos de ellos y no sentir remordimientos a cada bocado.
¿Busca el mejor helado de Orange County, California? House of Chimney Cakes es sin duda el lugar al que debe dirigirse para saciarse de deliciosos helados cremosos cubiertos con los pasteles chimenea más crujientes. Echa un vistazo a nuestro menú para elegir entre una gran variedad de sabores, coberturas, rellenos y mucho más.